Gobierno y Mosquitos
En los últimos días ha llovido ligeramente en nuestra ciudad. En Mérida se sabe que apenas cae un poco de agua, por las condiciones de humedad de nuestra tierra y debido a la carencia de drenaje, es casi inmediato que aparezcan nubes de mosquitos.
Sabemos que la presencia de estos insectos se debe a la acumulación de trastos y cacharros donde forman sus criaderos y que numerosas enfermedades, algunas de ellas que pueden ser muy complicadas y hasta mortales, se transmiten a través de sus picaduras.
Por lo anteriormente mencionado, no bien comienza la temporada de lluvias, cuando el gobierno estatal en turno, inicia las tareas de fumigación y abatización respectivas, con intención de prevenir futuras complicaciones.
Por lo menos así había sido hasta el año pasado. Las camionetas de la secretaría de salud del gobierno del estado fumigando, se habían vuelto parte del paisaje de esta temporada.
Pero en esta ocasión no ha sido así. Nuestra entidad está infestada de zancudos y nada es lo que la administración estatal hace al respecto.
Las redes sociales están llenos de comentarios de ciudadanos que piden se fumigue con urgencia, pero el gobierno del estado hace oídos sordos. A la administración que encabeza Mauricio Vila sólo le importa promover la imagen del gobernador y que éste prosiga sus paseos con cargo al presupuesto. Muchos nos preguntamos porque no se han realizado estas tareas, toda vez que toda administración destina recursos al efecto. No se entiende porque el régimen en turno, que blasona su honestidad y eficiencia, ha dejado de hacerlo.
Hacemos un llamado a los diputados y presidentes de los partidos políticos, para apercibir a la administración en turno, de la importancia de fumigar, para evitar conflictos a posteriori.
Claro que como Vila no es yucateco, esto no le interesa, ni le importa lo que ocurra a la gente, pero de ahí la importancia de ejercer presión, para que en aras de cuidar su imagen pública, cumpla con su deber.
Triste realidad de nuestro pueblo, tener que amagar con escándalos para que el gobierno cumpla sus obligaciones, pero eso fue lo que eligieron algunos inconformes. He aquí las consecuencias.
Seguimos pendientes...
Sabemos que la presencia de estos insectos se debe a la acumulación de trastos y cacharros donde forman sus criaderos y que numerosas enfermedades, algunas de ellas que pueden ser muy complicadas y hasta mortales, se transmiten a través de sus picaduras.
Por lo anteriormente mencionado, no bien comienza la temporada de lluvias, cuando el gobierno estatal en turno, inicia las tareas de fumigación y abatización respectivas, con intención de prevenir futuras complicaciones.
Por lo menos así había sido hasta el año pasado. Las camionetas de la secretaría de salud del gobierno del estado fumigando, se habían vuelto parte del paisaje de esta temporada.
Pero en esta ocasión no ha sido así. Nuestra entidad está infestada de zancudos y nada es lo que la administración estatal hace al respecto.
Las redes sociales están llenos de comentarios de ciudadanos que piden se fumigue con urgencia, pero el gobierno del estado hace oídos sordos. A la administración que encabeza Mauricio Vila sólo le importa promover la imagen del gobernador y que éste prosiga sus paseos con cargo al presupuesto. Muchos nos preguntamos porque no se han realizado estas tareas, toda vez que toda administración destina recursos al efecto. No se entiende porque el régimen en turno, que blasona su honestidad y eficiencia, ha dejado de hacerlo.
Hacemos un llamado a los diputados y presidentes de los partidos políticos, para apercibir a la administración en turno, de la importancia de fumigar, para evitar conflictos a posteriori.
Claro que como Vila no es yucateco, esto no le interesa, ni le importa lo que ocurra a la gente, pero de ahí la importancia de ejercer presión, para que en aras de cuidar su imagen pública, cumpla con su deber.
Triste realidad de nuestro pueblo, tener que amagar con escándalos para que el gobierno cumpla sus obligaciones, pero eso fue lo que eligieron algunos inconformes. He aquí las consecuencias.
Seguimos pendientes...
Comentarios
Publicar un comentario