Denuncia Ex Dirigente Corrupcion del Ayuntamiento a Presidente Nacional Panista

José Castañeda Pérez, ex presidente estatal panista denunció ante el presidente nacional del blanquiazul, Gustavo Madero Muñoz, la corrupción prevaleciente en el ayuntamiento de Mérida, en el que funcionarios municipales corruptos extorsionan a las constructoras que pretenden realizar obra pública en esta capital, solicitándoles cobros ilegítimos. Igualmente manifestó su molestia con los políticos que no saben honrar su palabra y cumplir sus compromisos, en clara alusión al alcalde de esta ciudad, Renán Barrera Concha La llegada del presidente nacional del PAN, Gustavo Madero, dejó de manifiesto la molestia que existe entre algunos liderazgos del partido y entre la militancia que no depende de la nómina municipal, por la actitud depredadora de Renán Barrera y sus colaboradores. Asimismo, dejó entrever la insatisfacción que existe en el interior del estado, por el modo con que el PAN estatal se comporta, tratando de imponer a sus allegados en cargos de elección popular y abandonando a aquellos aspirantes que no gozan de su simpatía. Igualmente dejó traslucir el temor que tienen Madero y sus seguidores a la elección de dirigentes a través de sufragio universal, situación que concluiría los cotos de poder existentes y la influencia de las facciones al interior del blanquiazul. El Presidente Nacional tuvo tres reuniones con el panismo yucateco, una rueda de prensa y una entrevista exclusiva concedida al Diario de Yucatán. La primera de las reuniones fue un evento del Comité Directivo Estatal, específicamente de Promoción Política de la Mujer, donde el dirigente dio un mensaje a la concurrencia, integrada mayoritariamente por empleadas del comité estatal y el comité municipal, que la verdad, tuvo escasa asistencia. Acompañado por el actual presidente estatal, Hugo Sánchez Camargo, se trasladó al segundo encuentro al fueron invitados los alcaldes de los diversos municipios gobernados por Acción Nacional. En este evento, hablo Renan Barrera en representación de sus homólogos. Acudieron senadores, diputados federales, diputados locales, ex presidentes del partido y algunos líderes. Entre las intervenciones que se registraron en este evento, destacó la participación del ingeniero José Castañeda Pérez, ex presidente estatal del partido, que expresó que hay políticos en el PAN que no cumplen su palabra y no cumplen sus acuerdos. Castañeda solicitó al jefe nacional que hiciera un ejercicio en el que públicamente requiriese que levantara la mano el alcalde que no pidiera diezmo en las obras que se realizaran en su municipio; y dejó entrever que por eso, a muchos constructores, incluyéndolo a él mismo, no les es posible trabajar con el actual ayuntamiento de Mérida, aunque ya lo hubieran hecho anteriormente con éste o con otros ayuntamentos. Madero guardó significativo silencio, ya que todos sabemos que el que no cumple sus acuerdos es Renán Barrera y que es Jorge, el hermano incómodo, el encargado del ilegal cobro del diezmo a todos aquellos que pretendan realizar obra pública en la ciudad de Mérida. Castañeda Pérez también señaló que al actual ayuntamiento le falta ética panista y no se trata el asunto de que no roben otros, para que yo lo haga, en clara alusión a los actuales funcionarios municipales. Es de destacar que la logística del evento y el equipo de sonido, el mismo que se usó en la campaña a la alcaldía, fue pagado y operado en los dos últimos eventos con dinero y empleados del ayuntamiento de Mérida, que encabeza Renán Barrera. Se pudo ver a Eira Polito y Pedro, a quien se acusa de pertenecer al PRI en el sonido; en tanto Madero pontificaba contra la corrupción. A Renan Barrera, se le vio aislado y nadie se acercaba a saludarlo, contrastando notoriamente la actitud de la gente, con la que adopta siempre que advierte la presencia del ex candidato a la gubernatura, Joaquín Díaz Mena o la del ex gobernador y ex procurador federal de protección al ambiente, Patricio Patrón Laviada, que se conducen siempre accesibles, cordiales y sencillos. Cobardemente Madero no hizo lo que Castañeda le solicitó, sabedor que ello solo evidenciaría a Renán Barrera y otros alcaldes más. Llamó la atención que el presentador oficial en el almuerzo de la élite panista fuera el patricista Raúl Arceo, lo que ocasionó comentarios de disgusto entre funcionarios del ayuntamiento. La sorpresa fue el notorio aislamiento que los panistas propinaron a julio Sauma. Pero a Hugo Sánchez tampoco le fue mejor, ya que dos alcaldes: la alcaldesa de Sacalum y otro más a quien no pudimos identificar, lo exhibieron acusándolo con el presidente nacional, destacando que el comité estatal esta dedicado a operar e imponer a sus candidatos a los diversos cargos de elección, subrayando que si no salía su candidato, como fue en su caso, entonces no apoyaban en campaña y dejaban al aspirante sólo. También los alcaldes dijeron que el comité estatal no hacía nada, que era evidente la carencia de estrategia, que no había trabajo proselitista, ni rumbo y que estaba muerto el PAN estatal. Al almuerzo de las cuatro de la tarde asistieron pocos delegados. Madero dejó ver que tal vez pudiera no reunirse el quórum reglamentario para sesionar en la suspendida asamblea nacional y que con esto, ya no se tendrían las reformas en los estatutos para elegir directamente a los dirigentes, nacional y estatales. Con lo anterior, se puede esperar que la línea sea que no exista quórum, reventando la asamblea; y de esta forma, impedir que la militancia elija a sus dirigencias estatales y nacionales, favoreciendo que el partido siga dividido en grupos, prevalezcan las facciones, que a la hora de tomar las grandes decisiones, acuerdan y negocian, en vez de proceder al ejercicio democrático del voto de las mayorías. Lo anticipábamos: la molestia y la división en las filas de Acción Nacional son palpables y sobre todo, la molestia que la parte sana del panismo meridano y el panismo yucateco experimentan contra la cada día mas notoria corrupción y los excesos sucedidos en el interior del ayuntamiento de Mérida, gobernado no por el panismo, sino por una gavilla de oportunistas, a los que lo último que les interesa es la doctrina partidista.