Casos de unidad, regrigeradores y posadas

Ayer por la noche, se realizó en conocido local social, la posada del comité municipal del PAN, con un lleno total. Sin embargo, no podemos dejar de mencionar que al menos la mitad de los asistentes, no eran militantes activos, a pesar que en la convocatoria así se había plasmado.

Pero cuando el militante pasaba al comité por su boleto, le decían que la posada era para militantes activos y simpatizantes. Esto hizo que muchos miembros activos no accedieran a un boleto y por eso no asistieron, razón por la cual muchos se enojaron, toda vez que resultó notorio que los pases se entregaron facciosamente, a amigos y simpatizantes de la presidenta en funciones, tratando de hacerla destacar en el aplausómetro, en aras de presentarla como una sólida opción rumbo a la alcaldía de esta ciudad. Primer tache. 

Alrededor de las ocho de la noche, Cecilia Patrón, acompañada de diputados, regidores, el alcalde y el gobernador, dieron la bienvenida al público asistente. Llamó la atención que los discursos, tanto de Cecilia como el de Mauricio Vila, hicieran referencia a la unidad del panismo, sobre todo porque para ambos, la unidad significa favorecer sus intereses y todo lo que les beneficie, de lo contrario, no es aceptable, volviéndose una unidad forzada, reiterando que siempre y cuando sea a su favor y ayude a sus intereses. 

Es preciso hacer notar el tono de los discursos, que más que ser propios de una fiesta, sonaron a que Mauricio Vila y sus partidarios, sienten amenazada su permanencia en el congreso, merced a que son conscientes que la ola de despidos, la falta de resultados, la ineptitud y polémicas de sus colaboradores, la confrontación con distintos grupos sociales, el aumento de impuestos anunciado y hasta la suspensión de festejos decembrinos, los dejan muy mal parados con la militancia y especialmente con la ciudadanía. Tanto Mauricio Vila como Cecilia Patrón saben que no han logrado estar a la altura de las expectativas de la militancia y el electorado; y temen el consecuente voto de castigo, que los dejaría muy mal parados, tanto en el legislativo, como en el cabildo, situación que comienza a quitarles el sueño, sobre todo,debido al sueño guajiro de Cecilia, de volverse alcaldesa. Por eso recurren a la intimidación y amenazas contra quienes se opongan a sus planes. Segundo tache.

Hay que recordar que cuando Vila llegó a la alcaldía, corrió muchos militantes que lo apoyaron y su régimen estatal ha seguido la misma tónica, por lo que tiene motivos de sobra para inquietarse ante una eventual vendetta electoral. No olvidemos que el actual jefe del ejecutivo estatal siempre decía que no le importaba la militancia, porque dos mil militantes no le significaban nada, ya que sus aspiraciones a la gubernatura serían avaladas por una designación (la manera en que los panistas llaman al dedazo).

Todo lo anterior deja muy claro que Renán Barrera no debe bajar la guardia, pues a su favor lleva el natural desgaste que los errores y omisiones de Vila y Cecilia implican y que de manera indirecta, favorecen sus aspiraciones. Por otro lado, para Renán bajar la guardia, equivale a la posibilidad de ser arrollado y avasallado por un par de rivales (Vila y Cecilia) que no acostumbran negociar, sino exterminar al adversario.

La nota de color de la posada, la dio una militante que habiendo ganado un refrigerador en una rifa, al momento de retirarse e ir por su premio, se encontró con que había desaparecido. En efecto, de manera sorprendente, alguien se robó el regrigerador que la dama había ganado y ello motivó que el regidor Gonzalo Puerto tuviera que echar mano de toda su elocuencia, para calmar a la indignada fémina y conseguir que aceptara una estufa a cambio. Así se las gastan los allegados de Cecilia Patrón, encargados de la organización del evento. Tercer tache.

Reiteramos, la posada del comité municipal del blanquiazul, puso de manifiesto la fractura interna que sufre el partido y que podrían capitalizar electoralmente sus opositores, porque es un hecho que si fuera Cecilia Patrón candidata a la alcaldía de Mérida, el panismo entregaría la joya de la corona. No tardaremos en saber que pasa. Cuestión de tiempo. 

Seguimos pendientes...