Le Dieron Palo a Reni

"El gobierno anterior era corrupto e ineficiente. Nos entregó un ayuntamiento quebrado. Los ciudadanos verán el cambio, al compararlo con un gobierno honesto y eficiente como el nuestro", señaló infinidad de ocasiones Renán Barrera durante la campaña. Pero Renán hasta la fecha no pudo o al menos no ha podido, demostrar que el gobierno anterior era corrupto e ineficiente. Tardó una enormidad para interponer denuncias sin nombre ni apellido y nada ha hecho contra quienes le antecedieron, ni siquiera puede argumentar que hay tortuguismo, porque en todo caso, debiera dar a conocer lo que hasta el momento se hace con ese objeto, pero no dice nada, porque los expedientes están abandonados por carecer de elementos para realizar imputaciones. Renán postulaba que la administración anterior gastaba de manera caprichosa y la acusó repetidamente de dilapidar los recursos que obtuvo por diversos medios. Empero, no bien hubo tomado posesión del ayuntamiento, cuando lo primero que hizo fue pedir dinero prestado, mordiéndose la lengua, pues antes criticó a los gobiernos que se endeudaban, aunque se justificó diciendo que ante la quiebra financiera del ayuntamiento, los empréstitos revestían calidad de emergentes. Poco tardaron las circunstancias en desmentir al alcalde, pues practicamente de inmediato nos enteramos de actos de dispendio, persecusión laboral, favoritismo, simulación y francas ilegalidades cometidas por funcionarios de su administración, buscando pagar favores de campaña y beneficiar allegados al régimen. Poco tardamos en enterarnos de irregularidades financieras y administrativas y Renán, que públicamente se ostentaba pertidario acérrimo del apego a la legalidad y la transparencia y la rendición de cuentas, ha hecho todo lo posible en sentido contrario, provocando la opacidad, el manejo discrecional y la sospecha, parapetándose en organismos a modo, integrados por partidarios suyos y donde los ciudadanos independientes no tienen cabida. Otra de las primeras cosas que hizo Renán Barrera apenas asumió la alcaldía, fue aumentar el impuesto predial, con la excusa de actualizar los valores catastrales en beneficio de los propietarios de los predios. El alcalde se llenó la boca presumiendo los logros obtenidos por su administración captando fondos por este concepto, a través de otorgar estímulos a contribuyentes cumplidos y morosos, a realizar diversas rifas y concursos y mediante una intensa campaña de difusión. Empero, este año manifestó pretendiendo vernos la cara a todos los ciudadanos, que no habría aumento de impuestos, aunque no tardó en contradecirse cuando se dió a conocer un incremento del 3.5 por ciento en el predial. Cuando se lo señalaron, se apresuró a desmentirlo, arguyendo que era solo un ajuste y asi envió su paquete presupuestal al congreso. Renán siempre ha presumido la capacidad de su tesorera, Claudia Canto. Al extremo de aumentarle en sueldo en una tercera parte respecto de lo que devengan los demás directores de su régimen y adquirir un premio patito destinado a realzar su imagen. Pero la realidad es que el sello del gobierno de Renán Barrera es la improvisación y la falta de claridad y ello propició que en el congreso le dieran palo al ayuntamiento y se vieran chasqueadas las intenciones del ayuntamiento de aumentar el monto del predial. Los diputados echaron abajo las pretensiones de Renán y por ende, los meridanos pagarán lo mismo por concepto de predial. No aumentará este impuesto. Veremos ahora si deveras Renán tiene una tesorera capaz y que hace para compensar los recursos que no ingresarán por esta vía. Esperamos que no recurran al expediente más sencillo que es aumentar alguna otra contribución municipal o adquirirlos a través de nuevos préstamos. Hemos siempre puesto en contraposición a los lloriqueos y pataletas de Renán Barrera y su administración, la actitud seria de Victor Manuel Correa Rachó y sus colaboradores, que ni lloriquearon, ni endeudaron a la ciudad, ni hicieron bisnes o negocios de dudosa moralidad o legalidad, sino que incluso dejaron de cobrar sueldos. Invitamos a los funcionarios actuales y al propio alcalde a igualar o incluso a superar eso. Por lo pronto, el ego del alcalde debe estar bastante adolorido, después del disgusto que los diputados le propinaron en beneficio de los habitantes de Mérida y así como antes hemos criticado su quehacer, hoy aprovecho externarles nuestro reconocimiento. Muchas gracias señores diputados por trabajar a favor de Mérida...