Feliz 2014
El año que termina nos trató muy mal a los meridanos. Tras un gobierno de trancisión severamente criticado, cuyo mayor pecado fue la inexperiencia y la falta de oficio político. el PAN recuperó la alcaldía de Mérida, a través de un político de coyuntura como Renán Barrera Concha. Un personaje que suspiraba por el puesto, pero que pocas o ningunas posibilidades reales tenía de llegar. Como se dice vulgarmente, los astros se le fueron alineando y las circunstancias se presentaron, mismas que Renán, un político oportunista por definición, no desperdició y haciendo un par de alianzas, con Ana Rosa Payán y Salvador Vitelli, accedió a la presidencia municipal. Huelga decir que las expectativas de la ciudadanía eran inmensas y él se encargó de incentivarlas, pues si hay algo que Renán hace muy bién es prometer, el problema que tiene, es que no tiene pantalones para cumplir. Así, Renán Barrera asumió el gobierno y en unos pocos días dio al traste con las esperanzas de los meridanos, que confia