La Buena Tiniebla
Amor mio, tu eres el ingrediente indispensable para la buena tiniebla. Eres la especia que da sabor y buen sentido al paladar, tal y como lo hacen: el comino o la pimienta. Amor mío, tu eres el ingrediente indispensable para la buena tiniebla, eres tan oportuna como un corte de luz; tan memorable como balada, tan seductora como un poema, tan sugestiva como caricia; y estremecedora, como el beso que se planta en la oreja. Amor mio, tu eres el ingrediente indispensable para la buena tiniebla, el que genera madrugadas largas, el que propicia insomnios en las piernas. Eres la tea que inaugura incendios; y el Lucero que bendice hogueras. Eres la dulce sombra que me arropa; y el paréntesis de gozo, donde las noches se congelan. Amor mio, eres el ingrediente indispensable para la buena tiniebla, eres la brisa que desnuda otoños y la fragancia que desluna esperas. Eres justo lo que se necesita, para pasar horas de amor, sin temor al infierno, en duermevela... Eres lo